Si descuidamos nuestra salud bucodental estamos descuidando la puerta de entrada de la salud en general a todo nuestro cuerpo. Así como el organismo requiere del deporte para mantenerse en forma y mejorar e incluso evitar determinadas patologías, el deporte también precisa que nuestra boca se mantenga sana y en el mejor de los estados.
En nuestra Clínica Dental Gíngiva orientamos y estudiamos de forma personalizada el caso de cada paciente de forma que mantenga una oportuna salud bucodental que repercuta de forma positiva en su óptimo rendimiento deportivo.
¿Por qué está tan relacionada la salud bucodental con la práctica deportiva?
Es habitual que nos encontremos con casos de personas que practican deporte de forma habitual, algunos a niveles muy profesionales e intensos, y que precisamente su salud bucodental se encuentre bastante afectada.
Es entonces cuando nos preguntamos…¿pero un deportista que cuida su alimentación, cómo puede tener tantos problemas de salud dental?, entonces…¿el deporte es beneficioso para todo nuestro organismo a excepción de nuestra boca?.
Intentemos dar una explicación convincente a ello:
- Cuando practicamos mucho deporte y de forma habitual, tendemos a consumir con bastante frecuencia bebidas con un alto índice de azúcar, como los zumos o las bebidas isotónicas. Ello repercute en el aumento de caries, cuyas bacterias también circulan por nuestro organismo a través de la saliva, lo que incide negativamente en músculos o articulaciones, tan necesarios para la correcta práctica deportiva.
- Los esfuerzos propios del deporte, sobre todo en los ejercicios de fuerza y resistencia, propician que apretemos los dientes en exceso, lo que acaba convirtiéndose en una práctica habitual que deriva en multitud de casos de bruxismo.
- Algunos deportes hacen que estemos sometidos a riesgos de golpe o caídas que lleguen a afectar a la boca, rompiendo o haciendo que perdamos algunas piezas dentales. Si no se reponen, la oclusión será deficitaria, los alimentos no recibirán la presión y troceado que realiza la dentadura y ello podría derivar en problemas digestivos e intestinales.
- Ya que hablamos de una mala oclusión, hemos de saber que ello está directamente relacionado con una respiración deficitaria. Ello nos debilita a la hora de la práctica deportiva y repercute en cansancio y bajo rendimiento.
¿Qué podemos hacer entonces para que salud bucodental y buenas prácticas deportivas vayan de la mano?
- Las revisiones periódicas y la prevención son fundamentales.
- En el caso del bruxismo, utilizar férulas de descarga es una importante herramienta para detenerlo y evitar sus estragos en nuestra dentadura.
- Solucionar caries antes de que vayan a más, ya hemos visto que no sólo es vital para nuestras piezas dentales, sino para nuestra musculatura.
- Reponer piezas rotas o perdidas también resulta básico.
En Clínica Dental Gíngiva apostamos por trabajar de forma intensa para que la práctica deportiva sea el mejor aliado de la salud bucodental y viceversa. Una boca sana es la mejor forma de ayudar al resto del cuerpo a estar a punto.
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